5.9.14

Ayer culminó, con la presentación de la prupuesta de convenio, la primera fase de un intenso trabajo de colaboración entre numerosos despachos de abogados, principalmente de la provincia de Málaga, para que cientos de clientes aunaran sus fuerzas hacia un camino de esperanza.

El trabajo comenzaba hace meses, con  una primera reunión de unos pocos abogados en el despacho de Ley 57 Abogados en Alhaurín el Grande, despachos que sin embargo aglutinaban un importante número de afectados. Esta reunión fue incluso malinterpretada por algún miembro del Colegio de Abogados que llegó a plantear una queja ante la convocatoria de tal reunión. (No hemos sabido nada de tal queja, por lo que la suponemos archivada).

Hubo una segunda reunión, mucho más concurrida, en el propio Colegio de Abogados de Málaga, al que de nuevo agradecemos brindara sus instalaciones. Ya en aquella reunión, con 23 participantes representantes de un colectivo de afectados más grande, incluso entidades financieras, se trazaron las líneas de colaboración en el objetivo común de favorecer las oportunidades de los clientes de recuperar su dinero.

Allí se expuso que las características de este concurso ponen por primera vez en el mismo barco a compradores de viviendas, administraciones y bancos, pues el volumen de crédito ordinario (el afectado por el convenio si se aprueba) es enorme. Los bancos perderán sin remedio enormes cantidades de dinero (hasta 600 millones de euros) si la empresa va a liquidación. Las administraciones dejarán escapar impuestos por elevadas sumas (también millones de euros) si la liquidación se impone como salida.Los compradores de viviendas (con contratos frustrados) se juegan los ahorros de toda una vida.

Todos perderán si alguno pierde. ¿Será el 50% de su crédito? ¿Será el 100%?

Posteriormente hubo que recabar datos de la Administración concursal, pues los textos definitivos del concurso eran insuficientes, lo cual fue algo más complicado y retrasó el proceso de confección de la propuesta y su desarrollo.

El mes de Agosto es un mes donde los abogados en su mayoría se fueron de vacaciones. Unos pocos quedamos trabajando en este asunto, y otros se reengancharon en Septiembre, para, en sólo 4 días, recopilar en papel las adhesiones verbales recibidas.

El fruto de este trabajo colaborativo se presentó en el Juzgado, esperando sirva de vía común para que los afectados (compradores, proveedores, administraciones y bancos) puedan tomar la senda de recuperación de sus créditos.

Sin el trabajo de todos los compañeros involucrados no hubiera sido posible. Grcias a todos por vuestro apoyo y gracias a nuestra plantilla de abogados y colaboradores. ¡Sois formidables!